Preparación
1. Preparar el bizcochuelo:
En un bol grande, batí el azúcar junto con el aceite hasta que la mezcla quede cremosa.
Agregá el jugo de naranja y mezclá bien.
Incorporá el almidón de maíz, la harina de arroz y el polvo de hornear. Mezclá todo hasta obtener una masa homogénea, sin grumos.
Precalentá el horno a 180°C y engrasá un molde mediano.
Verté la preparación en el molde y horneá durante 35 a 40 minutos, o hasta que al insertar un palillo, este salga seco.
Retirá del horno y dejá enfriar unos minutos antes de desmoldar.
2. Preparar el almíbar:
En una cacerola pequeña, colocá el agua, el jugo de naranja y el azúcar.
Llevá a fuego medio hasta que empiece a hervir, revolviendo para disolver el azúcar.
Disolvé la maicena en una cucharada de agua fría y agregala a la mezcla, revolviendo constantemente hasta que espese un poco.
Retirá del fuego y dejá entibiar.
Trucos y Consejos
Elegí jugo natural: Usá jugo de naranja recién exprimido para un sabor más fresco. Si usás jugo envasado, procurá que sea sin azúcar agregada.
Para una textura más esponjosa: Si tenés batidora eléctrica, batí bien el aceite con el azúcar al principio para incorporar más aire.
Opcional: Agregá ralladura de naranja a la masa para intensificar el sabor cítrico.
Conservación: Este bizcochuelo se mantiene tierno por 2 a 3 días en un recipiente hermético a temperatura ambiente.
Conclusión
Con una textura suave, un aroma fresco y un sabor delicioso, este bizcochuelo sin harina de trigo es una opción perfecta para quienes buscan algo diferente y libre de gluten. ¡Probalo y sorprendé a todos en casa!
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